Se espera que para este siglo XXI, Venezuela forme parte y participe de manera contundente al desarrollo moral y social con verdadera responsabilidad. Los valores y costumbres de nuestro país han sido estropeados con el paso del tiempo y vale la pena esforzarnos por su recuperación ya sea a corto o mediano plazo, la participación de cada ciudadano hará más fácil su desarrollo actuando con libertad expresándose sin miedos y respetando las ideas de otros, con la finalidad de depurar nuestra cultura y hacer más fuerte nuestros lazos de hermanos como venezolanos.
Este logro a largo plazo pero no restándole importancia tiene como visión unificar sin exclusión a ciudadanos, la participación con igualdad, mejorando la calidad con nuestros recursos naturales haciéndolos más sólidos y dándole gran valor. La preparación en cuanto a conocimientos para nuestro beneficio social, económico, cultural y moral, es necesario mirar al futuro y darse cuenta que podemos contribuir en el cuidado de las nuevas generaciones partiendo de la constatación de una realidad cuyos rasgos dominantes son:
La confrontación entre un viejo sistema (el Capitalismo) que no ha terminado de fenecer, basado en el individualismo egoísta, en la codicia personal, y en el afán de lucro desmedido y un nuevo sistema (el Socialismo) que está naciendo y cuyos valores éticos, la solidaridad humana, la realización colectiva de la individualidad y la satisfacción racional de las necesidades fundamentales de hombres y mujeres, se abre paso hacia el corazón de nuestra sociedad.
La pobreza material y espiritual en la cual permanecen aún millones de venezolanos, por lo mismo, imposibilitados de satisfacer sus necesidades primarias y desarrollar la espiritualidad inherente a toda persona.
La sustitución de la cultura del trabajo creador y productivo por la subcultura de la corrupción y el soborno como medios de acelerada acumulación de bienes y riqueza monetaria, extendida en importantes sectores de la sociedad. El uso y la promoción de la violencia sicológica y material que los medios de comunicación utilizan como factor para configurar en la subjetividad del ciudadano, la convicción de la imposibilidad de vivir en paz, en democracia y en la confianza de que es posible la realización común.
En fin este proyecto es de gran importancia para el mejoramiento tanto económico como social de nuestro país; ya que se busca el bienestar de nuestra patria y el que cada nuestro país vaya en camino hacia el desarrollo.
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